Halloween: del Reino Unido e Irlanda a Estados Unidos y el mundo

En el mundo moderno, vemos cómo tradiciones de ciertos países son adoptadas por otros incluso cuando sus culturas puedan ser muy diferentes. “Halloween” es una de las tradiciones que más se ha expandido alrededor del mundo y, aunque hoy se celebra con disfraces, dulces y cuentos de terror, en sus inicios, era un poco diferente.

¿De dónde viene Halloween?

Halloween se originó hace 2000 de una tradición celta (en los territorios que hoy conocemos como Irlanda, Reino Unido y el Norte de Francia) llamada “Samhain”, en la que las personas usaban disfraces y encendían fogatas para alejar a los fantasmas que, según creían, volvían a la tierra la noche del 31 de octubre, el día en que terminaba el verano y comenzaban los días oscuros de invierno.

Las tierras celtas fueron invadidas por el Imperio Romano, incluyendo su propia conmemoración a los muertos y la celebración de Pomona, la diosa de las frutas y árboles (de donde posiblemente venga la tradición de recoger manzanas).

El cristianismo también tiene relación con el Halloween al declarar el 1 de noviembre como el día de todos los santos (All-Hallows), convirtiendo el 31 de octubre el “All-Hallows’ Eve” (Víspera de todos los santos) y, con el pasar de los años y las modificaciones en la pronunciación, “All-Hallows’ Eve” pasó a ser “Halloween”.

¿Cómo llegó a Estados Unidos y al resto del mundo?

Halloween se celebra en una gran cantidad de países a nivel mundial.

En el siglo 19, hubo una gran hambruna en Irlanda que obligó a los Irlandeses a emigrar, aquellos que llegaron a Estados Unidos ayudaron a la propagación de la celebración de Halloween que, a pesar de que ya había llegado al país, no se celebraba en muchos estados.

Así, con el tiempo, comenzó la tradición  de disfrazarse e ir casa por casa pidiendo, en principio, dinero o comida. Esto evolucionó a lo que hoy llaman “Dulce o Truco” (Trick or Treat – que se traduce literalmente como “Truco o Trato”), pidiendo dulces en cada casa o asustando o jugándole bromas a quienes se rehúsan a dártelos..

Así, pasó de ser una tradición relacionada principalmente con fantasmas y brujería, a ser una tradición de la familia en la que los niños son los protagonistas (aunque en Estados Unidos y algunos países, incluso los adultos se toman muy en serio sus disfraces).

Con la globalización y el intercambio de culturas, esta celebración comenzó a ser conocida en Europa y América Latina y hoy en día se celebra en una gran cantidad de países a nivel mundial.

¿Qué elementos y tradiciones relacionamos con Halloween?

  1. Las calabazas: es inevitable ver una calabaza y pensar en hacerle unos ojos y una sonrisa (en inglés se llama “Jack O’Lantern”). Este es uno de los elementos más representativos de Halloween y bien sea reales, de plástico o incluso de papel, verás calabazas por doquier. Te invito a investigar la historia de “Jack O’Lantern”, es muy interesante.
  2. Dulce o Truco: esta tradición también está relacionada a Jack O’Lantern, quien iba de casa en casa pidiendo “truco o trato”. Pedir truco era un error pues significaba recibir una maldición para tu hogar. Con los años, las personas comenzaron a pedir comida o dinero y, hoy en día, solo se piden dulces o un “truco” que es, en realidad, una broma o susto.
Cada país tiene tradiciones específicas.
  1. Los disfraces: esta tradición comenzó con la intención de confundir a los espíritus y entes malignos pero se convirtió en una forma de diversión para toda la familia con concursos y premios para los mejores disfraces.
  2. El negro, morado, naranja, blanco y amarillo: ves estos colores juntos y piensas en Halloween. El negro representa la oscuridad y el terror, el naranja viene de la leyenda de Jack O’Lantern, el morado se relaciona a la magia y los hechizos, el blanco son los fantasmas y espíritus y el amarillo al fuego de las velas.

Aunque estos son los elementos más comunes, en cada país hay tradiciones específicas en cuanto a la comida y las actividades que realizan cada 31 de octubre. Y esta celebración nos demuestra cómo las culturas evolucionan y se mezclan, creando nuevas tradiciones. 

Esto se ve reflejado también en los idiomas. ¿Cuándo fue la última vez que escuchaste la frase “noche de brujas”? Hoy en día, casi todos lo llamamos “Halloween”. Los idiomas y las culturas no son estáticas, evolucionan y se adaptan. ¿Tú celebras Halloween? ¿Es común en tu país? ¿Conoces algún dato curioso sobre esta celebración? Comparte tus ideas en la sección de comentarios.

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