Cuando comenzamos el proceso de aprender un nuevo idioma es posible que nos encontremos a un estudiante que ha aprendido y dominado por si mismo los sistemas de comunicación involucrados en el idioma y, bueno, ese es mi caso. Ahora puedes estar preguntándote si te estoy mintiendo o si soy algún tipo de brujo por dominar un idioma tan complejo como el inglés pero, sorprendentemente, no es un proceso tan difícil.
Todo comenzó con algo que se llama “aprendizaje pasivo”, mientras veía telenovelas, series, especiales de comedia y películas en inglés, y también cuando jugaba videojuegos en línea, mi cerebro retenía vocabulario útil, estructuras gramaticales y expresiones que luego me hicieron darme cuenta que estaba aprendiendo un idioma nuevo. Vi que las plataformas que usaba eran muy útiles porque me daban el contexto necesario para entender dónde debería y no debería usar las palabras y estructuras que había aprendido hasta ese momento.
La clave es encontrar algo que realmente disfrutes hacer y que comiences con eso, puede ser cualquier cosa, desde ver películas, telenovelas, series; y si eres principiante puedes verlas en inglés con subtítulos en tu lengua materna. Adicionalmente, puedes leer libros, artículos, escuchar música, descargar alguna aplicación de redes sociales y seguir a personas de otras culturas para que puedas ir aprendiendo las expresiones coloquiales y al mismo tiempo aprender cómo y cuándo usarlas y si eres videojugador, como yo, puedes jugar videojuegos online donde la comunicación es sumamente importante para poder ganar partidas, es un reto difícil pero siendo perseverante se puede lograr, de esta manera fue como comencé a aprender inglés.
Espera... hay un “pero”.
Como muchas cosas en la vida, no todo lo que brilla es oro. Yo me volví en un hablante fluido pero me costaba mucho escribir ya que era una habilidad que no desarrollé, especialmente me costaba usar tiempos verbales como futuro o pasado. También, tuve problemas con los adverbios, conjugación de verbos y luché contra los homónimos. Para mi, era una pesadilla escribir o tener que completar algún ejercicio de gramática porque solo estaba acostumbrado a practicar el idioma a través de la comunicación oral.
Entonces, para poder dominar un nuevo sistema de comunicación, se requiere ir un paso más allá e inscribirse en un curso que te ayude a aprender la gramática y practicar otra habilidades. Adicionalmente, estar en un ambiente con un profesor y otros estudiantes puede ser beneficioso porque puedes aprovechar las ventajas que tiene relacionarse con otras personas, simplemente hablar con otros o el feedback del profesor son muy beneficiosos. Sin embargo, es entendible que no todas las personas puedan pagar por un curso, pero hay muchos recursos online que puedes utilizar y una vez hayas adquirido el conocimiento que quieres, lo puedes reforzar participando en clubes de conversación.
El camino a seguir
Todas las actividades mencionadas anteriormente son, sin duda alguna, una muy buena forma de comenzar a aprender un nuevo idioma; pero no son muy buenas opciones para aprender reglas gramaticales, cómo cambian las expresiones dependiendo del contexto, etc. Sin embargo, siempre hay algo para todos los gustos, así que la clave es conseguir un poco de tiempo libre y una actividad que realmente disfrutemos, que nos ayude a aprender tanto activa como pasivamente. Es de suma importancia conocer las expresiones idiomáticas, la jerga y vocabulario en general, reforzar lo que aprendemos con la ayuda de libros, un amigo o con un curso. Finalmente, una última recomendación, cuando sea que te encuentres con una nueva palabra te invito a que busques su significado en un diccionario inglés-inglés porque, a largo plazo, te será de ayuda en tu aprendizaje.
Cuéntanos, ¿cómo aprendiste inglés? ¿Conoces a alguien que haya aprendido por su cuenta? ¿eres una persona que aprendió por sí misma? Dinos tu historia en los comentario.